LA VERDAD SOBRE EL PROGRAMA LUNAR DE LOS EE.UU.
La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de los EE. UU. (NASA, por sus siglas en inglés) reconoció en el centenario de la llegada del hombre a la Luna, que su programa fue resultado de un error humano y una exigencia inesperada.
“Sólo se tenía programado un alunizaje para cumplir con lo prometido por el presidente Kennedy de poner un hombre en la Luna antes de que terminara la década [de los sesenta en el siglo XX]. Pero algo imprevisto pasó y tuvimos que enviar seis misiones más luego del Apolo 11”, señaló el administrador del organismo espacial.
En concurrida conferencia de prensa realizada en Centro Espacial Kennedy, el también astronauta reveló que ese “algo imprevisto” tuvo como protagonista a Neil Armstrong, el primer hombre en caminar sobre la Luna.
“Armstrong perdió tontamente la llave de su coche en la Luna, lo cual no hubiera sido un problema si no fuera porque el llavero en el que estaba era un regalo de aniversario de boda de su esposa Carol y se encaprichó en recuperarlo. Cuando se acabó el tiempo de la misión y el módulo lunar regresó a la Tierra armó tremendo berrinche y amenazó con decirle a los rusos que el alunizaje era una farsa si no regresábamos por su llavero”.
Al respecto, el administrador de la NASA admitió que, efectivamente, se había filmado en estudio un falso alunizaje “por si algo fallaba”, pero que nunca se usó, y recalcó que todas las imágenes difundidas sobre el hecho son verídicas al cien por ciento".
Comentó que luego de que enviaran el Apolo 12 y éste regresara sin “el maldito llavero”, la NASA consiguió una réplica del mismo que viajaría en el Apolo 13, la cual James Lovell, jefe de esa misión, se encargaría de traer de vuelta como si lo hubiesen encontrado en la Luna.
“Ahora comprenderán ustedes el verdadero significado de la famosa frase ‘Houston, tenemos un problema’. No era por la por la explosión del tanque de oxígeno líquido del Módulo de Servicio, pues siempre tuvimos claro qué hacer ante una contingencia como esa; era porque no se iba a poder traer de regreso el pinche llavero”.
Agregó que fue hasta el Apolo 17 que pudieron encontrar el dichoso objeto, gracias a que con el Rover Lunar, diseñado especialmente para ello y probado en misiones anteriores, se pudo ampliar el área de búsqueda.
“Nos gastamos millones por un llavero viejo que no valía ni 15 dólares, pero estaba en juego el prestigio de la Nación”, dijo levemente molesto el astronauta, quien comentó que Armstrong explicó en su momento que se llevó la llave del coche a la Luna para que su mujer no lo fuera a usar en su ausencia, ya que no tenía licencia de conducción y manejaba como una lunática.